viernes, 17 de diciembre de 2010

Escritura "vs"... mmm... perdón: "Y" Piratería

(Perfectamente traspolable a las otras artes también)

La piratería se basa en conseguir los objetos sin comprarlos. O haciéndolo ilegalmente, en mercados no oficiales. ...y aquí es en donde entra la figura de La Ley, y aquí es en donde empieza a confundirse todo.

El pirata no es criminal. Eso nos quieren hacer creer quienes dominan el mercado hasta ayer reinante a nivel planetario. Ellos, quienes ganan (y pronto dejarán de hacerlo) decenas de millones de dólares anuales basándose en una cultura de apropiación más que de atribución. Pues bien. Llegó nuestra hora. 

La Piratería no es mala ni es buena "absolutamente". La Piratería sirve a unos intereses y va en contra de otros. Cabe en nosotros definirnos partiendo de la base de que la piratería es un hecho, más allá de las clasificaciones y los juicios. Y, una vez nos hayamos definido, juguemos su juego. 

Si el “antes” ya está... (primero pagar, después recibir) ¡vayamos por el "después”! (disfrutar, y sólo después, si se quiere, merece, etc., contribuir): Acompañemos los tiempos que corren no limitando la distribución de nuestras producciones, ni poniendo los consumidores (felices) en contra de "nosotros", los productores (gruñones), sino que juguemos su juego poniéndonos del lado del consumidor (que es lo que en definitivamente somos nosotros el resto del tiempo que no estamos produciendo, eso es obvio) y confiemos profundamente en la buena consciencia del prójimo.

Las claves que guían mi pensamiento, y con el que no me ha ido del todo mal en la vida, son pocas y sencillas: Primero. Abracemos el cambio. Segundo. Seamos realistas. Tercero. Confiemos en los demás. Aquí les regalo un claro ejemplo de cómo ponerlas en práctica...


Yo fui -soy, es cierto, soy- pirata. El 99% de mi colección musical se vio incrementada gracias a internet. He mirado -me atrevo a decir- más de cien películas en línea. Y todos los días bajo los textos más variados de la red para mi propio solaz. Sí, soy pirata. Apuesto que también vos lo sos (y apuesto mucho, jeje). Así que ambos sabemos muy bien que lo que nos lleva a descargar archivos de internet es el disfrute. Buscar objetos en la red sin pagar lo que (dicen que) se debe pagar, no está guiado por la malicia ni por el lucro, sino más bien por la búsqueda de placer, conocimiento y hasta poder, si se quiere, (pero "poder" del rico en espiritualidad y no en dinero), del que se refiere al crecimiento personal, el poder-nosotros-mismos alcanzar una meta por nosotros mismos planteada... 

En fin, muchas razones van apareciendo antes que las onerosas-capitalistas oscuras y vampirescas...

Es lógico. Prevalecen las personas honestas. Aun con su picardía. Aun con su “cuelgue”. Son más las personas a las que sí les importa el prójimo. Y no digo que "lo amen como a ellas mismas", como dicta el credo católico... eso es una utopía, o cuanto mucho, una iluminada excentricidad.

Estoy con quienes no pueden satisfacer su sed de arte ni conocimiento con el dinero que poseen sus bolsillos. Estoy con quienes no se resignan a esperar ganar la lotería para comprarse el último libro/disco/lo-que-sea de tal autor. Estoy con los que creen que todos deberíamos ser artistas. (Pero... si todos somos artistas... ¿de qué viviríamos? Jajaja, buena pregunta. También estoy con los que piensan que la sociedad encuentra su equilibrio finalmente, y también habrá gente que quiera ser sastre o docente... ¿Y por qué no sastre docente artista? ¡Me maravillaría!)

Al grano. Existe la piratería. La apoyo. Pero también debo buscar un medio de subsistencia de mi propia persona, como productor de bienes pirateables (léase literatura en mi caso). Lo que propongo a quienes me lean, y seguramente no soy el primero en hacerlo (de hecho, no serlo implicaría que la idea está más difundida de lo que cabe esperar, y eso es bellísimo...), es que ayudemos a la piratería, proveyéndole (dándonos) productos de mejor y mejor calidad. ¿Por qué? Pues porque lo que propongo es lo que han estado haciendo más que nada los programadores desde hace algunos años, pero que muy pocos intentaron con su arte y las otras formas de producción intelectual:

Difundir producción propia de manera libre y gratuita, proponiéndoles a los lectores-consumidores que, si les gusta la obra, donen una suma ínfima a su productor (detesto decir creador, me suena demasiado eclesiástico, pero bueno, suena lindo...) para colaborar con su causa.

No será mucho dinero, ni debe serlo, pero pensándolo bien, un autor literario por ejemplo... ¿cuánto cobra neto del precio de tapa de su propio libro? ¿Un 5%?, tal vez más, sí, ¡pero a veces menos también!. Lo que implicaría que de un libro vendido a $20,00 al público, luego de pagar publicidad, editores, distribución, imprenta, etc., etc., etc., nos quedarían apenas $1,00 como autores del mismo...  (Siempre dependiendo del prestigio del autor en cuestión, ya que su nombre pesa en las ventas si es alguien conocido..., y, en ámbitos de circulación pequeños, las cifras son distintas, pero el radio de difusión/alcance de la obra es mucho menor también... aunque esto es para discutirlo en otra ocasión mejor, pues el punto quedó claro con lo poco que dijimos, ¿verdad?)

¿Acaso no está buena la idea? Eso sí. No es válida para escépticos del ser humano... puesto que ellos dirán que todo el mundo leerá los textos pero sólo sus madres y novias abonarán algo de dinero... En fin, el tiempo dirá...

Los dejo con ese pensamiento revoloteando feliz... y me voy a “liberar” un libro a un lugar público...

(¿curiosidad? entrá aquí...)

PD: Sí, ya sé que el mejor maestro es el ejemplo... aguarden, pues, que en unos días empezaré a colgar un ensayo bastante extenso en este misma página...

2 comentarios:

  1. Muy bueno, de todos modos no sólo los programadores hacen lo que dijiste, también miles de poetas callejeros claman por una monedita en los trenes de capital y GBA todos los días. Creo igualmente que es una buena manera y porqué no, probar...
    Asimismo hay otra cuetión: está muy bueno CITAR a quien se lee, porque este tipo de pirateria, la cual podríamos denominar como "creatividad cero" aquella que posee muy pocas referencias, sobreabunda. Pues el cálculo resulta muy claro:cuanto menos cito lo que leí de un anónimo, o un afamado, mas creativo soy.

    Abrazo y agunanten los piratas

    ResponderEliminar
  2. Comentario Complementario:
    Vale proponer otra idea (tal vez más original) y es que en las páginas que invitan a hacer una pequeña donación, figure un contador de dinero-ya-recibido. ¿Por qué? Eso se me ocurrió en base a lo que pensé al leer lo que aparece desde hace varias semanas en las páginas de wikipedia, que es su invitación a "hacer un donativo de 20, 35, 50 dólares, o del importe que puedas, para proteger y mantener Wikipedia" (textualmente). ¿Qué sucede? Que unos renglones antes dice: "Si los 400 millones de usuarios de la Wikipedia donasen un dólar cada uno, tendríamos 20 veces más dinero del que necesitamos." ¿20? ¿35? ¿50? Si tienen tantos lectores, ¡¿con qué necesidad piden tanta plata a cada uno de ellos?! esta vez no han sido tan brillantes como de costumbre al hacer cálculos, pues cae de maduro que exageraron un poco...pues bien, ya han captado mi idea, ¿verdad? ¡Tampoco es cuestión de andar haciendo multi-millonarios por allí! Por lo que deduzco que si en las páginas que piden donaciones (válidas, meritorias, sinceras) hubiera marcadores de dinero recibido, las personas harían un cálculo acerca de lo que dichos productores se merecen y entonces podrían depositar sin miedo a estar -nuevamente- contribuyendo a la desigualdad en el mundo. (Uno -que por supuesto no puede estar donando a todo el planeta- podría pensar: "bueno, pero si le dono a este, y a aquél no, y todos hacen lo mismo, entonces, este será rico, y aquél un pobretón, así que mejor lo dejo en manos del azar y no le dono a nadie") ...bueno, hasta aquí mi nuevo aporte, no quiero enredarlos más, era sólo algo más en lo que pensar. Los quiero.

    ResponderEliminar

Sírvase Ud.!

Contenido bajo Licencia de Creative Commons